viernes, 6 de agosto de 2010

Es verano.




En una temperatura de 20 grados donde corría el aire suavey pegajoso a la vez, se incrustaban las briznas de arena mostaza en los brazos.
La sensación de falta de aire se respiraba sin poder tan siquiera hacerlo. Poniendo todo el empeño en conseguir absorver algún tipo de olor a sal que en realidad no existía.

Se oía música desde lejos, y en un solo oído retumbaban otras notas diferentes con una fuerza insoportable que terminaban por convertirse en la canción más amada del mundo.

Bebe del vaso que ya está prácticamente roto, pero cuidado no te cortes.



Beirut – Nantes

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Sonic ways.

Me vuelve loco la doble personalidad de esta pequeña ninfa. Tal vez de todas las ninfas. Esa mezcla de una soñadora ternura infantil y cierta temerosa vulgaridad. Ya sé que es una locura escribir este diario, pero el hacerlo me proporciona una extraña emoción, y solo una amante o esposa, podría descifrar mi microscópica escritura.

(Lolita)