Distrito postal.

Conservar un amigo no quiere decir que tengas que llamarle todos los días. No me hace falta hablar contigo todos los días para saber que te echo de menos y que cada pensamiento que se me pasa por la cabeza, más o menos absurdo, me gustaría contartelo al momento.

Quiere decir que aunque sienta que cada vez que vuelves y vas y me quedo en casa sin ir a despedirte por miedo a no dejarte marchar otra vez más, se me quiebra un trocito más la ilusión, que de golpe se vuelve a recomponer los días en que estás aqui.

Necesitaría muchsimas más dosis de cafeína compartidas y muchísmos más paseos hablando hasta quedarme sin más palabras que decir y seguir en silencio, unos minutos, caminando, dejando que pase el tiempo lento y se escurra entre los pocos días que permaneces aqui.

Ojalá sea verdad que seguimos siendo igual y que sigamos siéndolo. Ojalá llegue un día en el que pierda poco a poco la dependencia porque seguramente me sea más fácil dejar de tener que irme inmediatamente a los días de hace un año para comprender los actuales, porque aunque no me haga bien, es la única forma que tengo de recordarte.


Te veo en muchas partes y te echo de menos en prácticamente todo. Nunca creí que pudiese llegar a quererte tanto.




Para Lara y David.